Quiero decirte lo que siento. Pero que ilusa soy tu lo sabes todo, mis alegrías, mis preocupaciones, sabes todo lo que hay en mi corazón.
Arrodillada ante tu casa lloro sin calma, el arrepentimiento me embarga, eh pecado como nunca antes lo había hecho. Tu nuevo mandamiento, amansen los unos a los otros, ama a tu prójimo como te amas a ti mismo.
Mi pecado original ah regresado, Dios mío perdóname. Has que vuelva mi alma de niño para poder llegar al paraíso, para alcanzar la santidad.
Escrito por: Alejandra Molina.
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