Hoy deseo terminar este día como ningún otro. Tal vez es muy temprano para empezar a escribirte, pero con el tiempo puedo complementar lo plasmado.
Avanzar para recibir mas conocimientos, una nueva historia que conocer y contar. El primer motivo para hablar de ti, la preparación de un café. "Negro como la noche, duro como la muerte y dulce como el amor".
Una persona responsable, respetuosa, colaboradora, luchadora y competente.
Un pocillo multicolor, helicóptero en 3d. Mi fruta favorita, en tú bebida. Te demuestro mi afecto con un abrazo...Uno, rechazo, dos, concentración en otro espacio, tres y último intento, marchando hacia la salida. El abrazo se brindó en otra ocasión, lleno de fuerzas y afecto; no esperaba la respuesta dada. Aquel punto en donde podía actuar tal y como lo indica mi nombre.
Logré que te concentraras en mis pensamientos. Luego de enterarme por cuales mares ya habías cruzado, me detuve en dos de ellos, noches soñando, intentando descubrir los enigmas que contraen. Disfrutar todo al máximo, saber tomar una correcta decisión.
Aunque un detalle me contrajo decepciones, no me importó porque lo necesitabas. Ahora triste por tu posible partida, añorando, orando, porque no sea nada grave el diagnostico. Quiero decirte que aunque no nade en ti, el amor lo tienes allí, esperando ser visto y usado, tenemos tiempo para todo; aprovéchalo. Gracias por las enseñanzas dejadas en mi.
Escrito por: Alejandra Molina
Avanzar para recibir mas conocimientos, una nueva historia que conocer y contar. El primer motivo para hablar de ti, la preparación de un café. "Negro como la noche, duro como la muerte y dulce como el amor".
Una persona responsable, respetuosa, colaboradora, luchadora y competente.
Un pocillo multicolor, helicóptero en 3d. Mi fruta favorita, en tú bebida. Te demuestro mi afecto con un abrazo...Uno, rechazo, dos, concentración en otro espacio, tres y último intento, marchando hacia la salida. El abrazo se brindó en otra ocasión, lleno de fuerzas y afecto; no esperaba la respuesta dada. Aquel punto en donde podía actuar tal y como lo indica mi nombre.
Logré que te concentraras en mis pensamientos. Luego de enterarme por cuales mares ya habías cruzado, me detuve en dos de ellos, noches soñando, intentando descubrir los enigmas que contraen. Disfrutar todo al máximo, saber tomar una correcta decisión.
Aunque un detalle me contrajo decepciones, no me importó porque lo necesitabas. Ahora triste por tu posible partida, añorando, orando, porque no sea nada grave el diagnostico. Quiero decirte que aunque no nade en ti, el amor lo tienes allí, esperando ser visto y usado, tenemos tiempo para todo; aprovéchalo. Gracias por las enseñanzas dejadas en mi.
Escrito por: Alejandra Molina
Comentarios
Publicar un comentario