Solo es una soga con una punta libre.
El ruido impertinente de la podadora interrumpe mi descanso. Con un príncipe a mi lado comienza éste día. Recargando baterías, alguien se va, el pum de la puerta despide un habitante de éste hábitat.
Haciendo el mismo horario, hasta cuando decidí contarte lo que sucedía. Te tengo en mí desde que despierto, ya sabes que te considero parte vital de mi felicidad, pero a pesar de, me hace falta algo. Algo no de mi cuerpo físico, diría mejor que del energético o pequeñas porciones de todos los que tenemos.
Quiero sentir la música, no solo en mis oídos, quiero vivirla, mis párpados cerrar, conocer el mensaje que me trae cada nota, compuesta melodía.
Últimamente eh admirado la pintura, paisajes hermosos; montañas, cielo, alegre y triste, nubes de todos los tamaños, móviles, pasajeras, traviesas, gaviotas vuelan, ardillas en árboles, árboles coloridos, viejos y grandes, con un amigo, porque como decía su creador, “Yo pienso que todo en éste mundo debe tener al menos un amigo a su lado acompañándolo”. Arbustos, ríos, olas, rocas, atardeceres, reflejos, líneas de agua, rasgos de oscuridad y luz.
Estos son solo pensamientos, conexiones en mi mente, temo que de mi boca hayan salido, la gente puede llegar a creer que mi locura aumentó y no quiero que se enteren todavía.
No te eh dicho en si lo que quiero, creo que no llegare a ese punto, eh olvidado el camino.
Te hablo a más de un kilómetro, no te veo, pero creo que me escuchas. Hoy no te eh regalado bonitas palabras, que descuido el mío.
Eres mi capitán, llevas el rumbo en éste barco.
Tú eres todo en mi, todo lo que quieras imaginar, y lo que no también, eres mi aire, mi mar, mi capitán. Eres lluvia, cielo, tierra, argumento de mis letras. Sos candencia, camino, luz, tacto, tiempo.
Cada letra que me dices formando palabras son esquemas que crean la hoja con trazos.
En fin, no se que pasa, puedo llamarle vacío, vacío de vida, pero no de ti, porque cada vez estás más dentro de mí.
Escrito por: Alejandra Molina.
El ruido impertinente de la podadora interrumpe mi descanso. Con un príncipe a mi lado comienza éste día. Recargando baterías, alguien se va, el pum de la puerta despide un habitante de éste hábitat.
Haciendo el mismo horario, hasta cuando decidí contarte lo que sucedía. Te tengo en mí desde que despierto, ya sabes que te considero parte vital de mi felicidad, pero a pesar de, me hace falta algo. Algo no de mi cuerpo físico, diría mejor que del energético o pequeñas porciones de todos los que tenemos.
Quiero sentir la música, no solo en mis oídos, quiero vivirla, mis párpados cerrar, conocer el mensaje que me trae cada nota, compuesta melodía.
Últimamente eh admirado la pintura, paisajes hermosos; montañas, cielo, alegre y triste, nubes de todos los tamaños, móviles, pasajeras, traviesas, gaviotas vuelan, ardillas en árboles, árboles coloridos, viejos y grandes, con un amigo, porque como decía su creador, “Yo pienso que todo en éste mundo debe tener al menos un amigo a su lado acompañándolo”. Arbustos, ríos, olas, rocas, atardeceres, reflejos, líneas de agua, rasgos de oscuridad y luz.
Estos son solo pensamientos, conexiones en mi mente, temo que de mi boca hayan salido, la gente puede llegar a creer que mi locura aumentó y no quiero que se enteren todavía.
No te eh dicho en si lo que quiero, creo que no llegare a ese punto, eh olvidado el camino.
Te hablo a más de un kilómetro, no te veo, pero creo que me escuchas. Hoy no te eh regalado bonitas palabras, que descuido el mío.
Eres mi capitán, llevas el rumbo en éste barco.
Tú eres todo en mi, todo lo que quieras imaginar, y lo que no también, eres mi aire, mi mar, mi capitán. Eres lluvia, cielo, tierra, argumento de mis letras. Sos candencia, camino, luz, tacto, tiempo.
Cada letra que me dices formando palabras son esquemas que crean la hoja con trazos.
En fin, no se que pasa, puedo llamarle vacío, vacío de vida, pero no de ti, porque cada vez estás más dentro de mí.
Escrito por: Alejandra Molina.
Comentarios
Publicar un comentario