ALGÚN DÍA LLEGARÍA HOY.

Cuando salgas al macro-mundo llega armado y preparado.

Porque Dios nos envía grandes y pequeños regalos, que en algún momento comienzan a funcionar como motor. Hay una punta para cada cuerpo. Hay una porción que se ha quebrantado.
Aunque en parte se que en algún momento tejemos mal, eres portador de esperanza y debes continuar. No me encuentro en tus zapatos pero si los tengo al lado, siento tu dolor y aún se agranda más sin tener cierto medio para curarlo.
No tengo una cascada pero si un pozo que se va llenando, ¿Mañana me ayudaras a desocuparlo? No lo veas como un ovalo formando un cero, que lo ubicas en tu lado izquierdo, derecho o lo bautizas, indefinido. Estoy en medio, en el centro de dónde quieras tenerme.
Te conviertes de una línea delgada a gruesa en mí a medida que el color en el cielo se transforma.
Éste día en el que tendría que preocuparme por tu actuar, en el que, sabía que la base se desvalorizaba y parte de la decepción de un segundo día empezaba. En el que el vacío se transforma en materia incompleta, aún llamado falta de algo.
¿Cómo puede ser posible que no mires en tú alrededor un poco más de lo que es?
Que desasosiego que en éstos casos si te escriba, pero a la vez me dio cuenta que no puedo quedarme en silencio por mucho tiempo sin dar a conocer lo pienso y siento.
Definitivamente uno no termina de conocer a las personas y como escuché hoy, los seres humanos tratamos de llenar nuestros vacíos con todos los que nos rodean, sin embargo, a veces queremos llamar la atención.
Entiende que eres muy importante, y percátate que soy capaz de darme cuenta como te encuentras, lo siento, y hasta muy dentro me llega tu aura.
No puedo llegar a saber todo sobre ti, no obstante creo que para algo estoy y aunque a veces no lo tenga muy claro como dice una conclusión: Todo a su debido tiempo.
Quiero ser colorido, ¿Alguien me ve?.....Pero ¡claro!, si mis colores favoritos son los neutros y como poco con los vivos debo verme en blanco y negro y quedar oculto entre las sombras. Siento que he cambiado y no para bien, me eh dado cuenta que se está perdiendo algo de mi. No logro saber con exactitud qué es.
Mi corazón es mi munición, mis manos el proyectil y la potencia, mi mente. A pesar de que sepa y me sienta triste, se que debo darme alientos y dártelos también porque tampoco estás bien. Me siento un adorno del mundo. Ofrezco belleza externa.
Exclusivamente con plegarias no se es bueno. Sólo se que Dios está aquí con nosotros, en este momento me acobija y le pido con amor y fe que nos ayude.

No se puede dar por terminado el abismo solo porque sientes plano, se podrán encontrar poco centímetros de descanso, son fines momentáneos. Nosotros solemos salirnos de la línea, pero no se sabe que traerá el nuevo camino, es más, sin salirnos de la recta no tenemos conciencia de que se nos aproxima, pero sea cual sea el transito no podemos estar desapercibidos ante cualquier situación.

La soledad es probable camuflarla con cosas, el amor con dinero, pero la tristeza profunda es casi imposible disfrazarla con una brillante sonrisa.

Escrito por: Alejandra Molina.

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