LA VIDA, UNA FÓRMULA.


Cada uno es el encargado de plantear su propio método llamado vida, con un único derivado; la muerte.

Desperté en un desierto que se fue poblando, desde lo que se puede ver y tocar hasta lo intangible; personas, tecnología, sistemas, sentimientos, deseos, mentiras.
Era dócil, todo era nuevo para mí, adaptarme fue difícil pero lo logré. Eso pensaba hace pocos días…
Un pequeño aspecto de todo, puede llegar a ser una operación, cifra o dígito, sea lo que sea hace parte de éste compuesto. El causante de la destrucción de la tierra llega a mí en unidad, vestido de amor. Cerró mis ojos parcialmente con su voz, me entregué en alma y medio cuerpo, desafíe a mis focos precisos, me expandí hasta olvidar mi forma casi por completo.
Todo entre paréntesis, variable X más constante hace producto con las circunstancias Y.
Diversos aspectos que se deben tejer; multiplicaciones. Después del igual; el final, cero como resultado singular.
No sé qué significa éste lenguaje, no entiendo que debo hacer,  le temo al futuro, acá llueve muy fuerte y mi paraguas se está dañando. Fingir, fingir estabilidad, fingir fortaleza, ya no más, es difícil ahora continuar. Quiero tener muchas cabezas para distribuirles todo lo que acá me atormenta. Olvidarme de todo sería mejor, quedar en blanco podría ser una solución.
¿Qué otros términos puedo utilizar?  Interés, poca confianza, incertidumbre, esperanza. Inseguridad, celos, amor verdadero y extremo. Dudas, tristeza, soledad e impotencia. Algo con más relevancia, ausencia de Dios.
En algún momento se gira, empero, existen condicionales que no se deben omitir. Andar por hay, donde todo nos marcan o donde nosotros contrastamos tiene un precio inicial y final.
Ser causante del sufrimiento que se ve como en una sala de cine, escenas ampliadas, a todo color, no se escapa ni un detalle, el sonido tan fuerte, que se siente como si el latido de tu corazón golpeara las paredes de tu alguna vez llamada cárcel.
Tú lo sabes, yo lo sé, el papel en el que escribimos la fórmula general es rugoso, con fondo multicolor. Sólo se tiene una hoja en la que dejar signos de pérdida de esperanza y cariño, aquella en la que los sueños fallidos tienen valor, donde el sufrimiento da energías y en donde el amor entre otras cosas es un escudo y lucha contra todo lo que se le atraviese. 
Busca la construcción y la mejor sustentación.

La vida es una sustancia compleja que con el tiempo buscamos armar su estructura.

Escrito por: Alejandra Molina

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